El jefe del monasterio de la provincia de Phichit, Phra Ajarn Saifon Phandito, declaró a la cadena PBS que el uso de cadáveres forma parte de una “técnica de meditación” que él desarrolló.
La niña habría sido reclutada por disidencias de las Farc, en el municipio de La Plata, Huila. Su cuerpo y el de otras cuatro personas que serían menores fueron hallados en el norte caucano.